"... Entonces, eh..., siempre ando con unos chistes en el bolsillo, ¿ves? Este es un librito de chistes que encontré ahí en..., en el negocio de periódicos, ¡eh!... Pues les voy a leer algunos chistes y luego vamos a analizarlos, ¿de acuerdo? Mira los chistes se pueden analizar como los textos sagrados, es igual, ¡eh!, es..., es de acuerdo como tú los cargues.
¡Aaay! El barco va a la deriva y no hay esperanzas de salvación, bueno esto no es la decisión de nuestro mundo, ¿no? A pesar de ello un anciano minero mastica..., dice minero pero es marinero, se equivocaron, ¡eh! Un anciano marinero mastica tranquilamente un trozo de pan. ¿Cómo puedes comer en un momento así?, le pregunta un compañero mientras el barco se está hundiendo. Y él dice: siempre me han aconsejado que coma antes de beber. ¡Oye, pero si esto es budismo Zen puro!
Lo conocen ese monje que lo están persiguiendo un león y..., y..., se lanza a un precipicio y, ¡ahhh!, él..., y se agarra de un árbol, no es cierto, ¿no?, un manzano que está ahí en el precipicio, y hay un león arriba y hay un león abajo, ¡ahhh!, ya no puede subir ni puede bajar, y ¿qué hace? Y el zen dice, ¿qué hace el monje?, ¡un león arriba y otro abajo!, pues..., se come una manzana, con mucho gusto se come una manzana.
Lo conocen ese monje que lo están persiguiendo un león y..., y..., se lanza a un precipicio y, ¡ahhh!, él..., y se agarra de un árbol, no es cierto, ¿no?, un manzano que está ahí en el precipicio, y hay un león arriba y hay un león abajo, ¡ahhh!, ya no puede subir ni puede bajar, y ¿qué hace? Y el zen dice, ¿qué hace el monje?, ¡un león arriba y otro abajo!, pues..., se come una manzana, con mucho gusto se come una manzana.
¡Ahí está el pasado!, ¡ahí está el futuro!, ¿qué va pasar?, ¿qué no va pasar? Déjate que me coma mi manzana, ¡eh!, vamos viviendo hoy tranquilamente, es ahora cuando la cosa está pasando, todo está aquí. Basta de pensar en térm..., ¡ahhh!, en términos negativos. Yo voy a decirles que esta conferencia va a ser ciento por ciento positiva, yo ya no creo más en las cosas negativas. Me dicen, en el mundo..., ¡el mundo es violento! Yo digo, ¡no!, el mundo no es violento, hay mucha violencia en el mundo, pero en el mundo no hay lo que los periódicos nos quieren hacer creer, el mundo no es violento, hay violencia en el mundo, ¿comprendes?, y quiere no haberla, porque el mundo..., la esencia del mundo es la paz.
Yo no quiero pensar así, yo no quiero ver mi hijo al borde de un abismo y no quiero gritarle, ¡no te vayas a caer!, quiero gritarle, ¡conserva, por favor, tu equilibrio! Yo no quiero recitar el padre nuestro y al final decir, presérvanos de todo mal, yo quiero decir, consérvanos en el bien. Porque hemos ido siempre pensando en términos negativos, ¿no es cierto? Yo no quiero pensar en términos negativos, yo me quiero comer tranquilamente mi manzana, ¡eh!, yo no quiero pensar que las cosas no están. ¡Si Dios no está aquí!, ¡no está en ninguna parte! ¡Si el paraíso no está aquí!, ¡no está en ninguna parte! ¡Si la vida no está aquí!, ¡no está en ninguna parte! ¡Si la paz no está aquí, no está en ninguna parte! Si tú no estas aquí no estas en ninguna parte, si yo no estoy aquí no estoy en ninguna parte. Entonces yo tengo que estar aquí, ¡eh!..., haciéndole frente a esta situación de..., de dar una sesión de psicomagia, pero estoy aquí, ¡eh!, como puedo. Además no puedo hacer mis rituales. Yo cuando escribo tengo unos rituales, por..., me pongo un collar de..., de cuentas de vidrio, soy ridículo, ¿no?, y cosa rara, tengo un perfume japonés y me perfumo la suela de los zapatos, ¡pfff!, y entonces escribo bien, y si no me perfumo la suela de los zapatos no puedo escribir, son manías, ¿no?, pero las manías es una maravilla."...
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